⎯ "La agonía del destierro" obtuvo el Premio Astragal 2012 y pudo verse en la Sala Astragal de Gijón, en Valey Centro Cultural de Castrillón y en la Casa de Cultura de Avilés.
⎯ "La agonía del destierro" consta de dos videoproyecciones mostradas en Valey Centro Cultural de Castrillón entre el 8 de Noviembre y el 10 de Diciembre de 2012.
⎯ El conjunto del proyecto está formado por 14 fotografías sobre papel recubiertas de cinta de embalaje, reforzando la sensación de claustrofobia.
⎯ Una aproximación artística al miedo
⎯ “La agonía del destierro” es una interesante muestra visual de aquellos sentimientos privados de miedo que todos sufrimos en algún momento; las dos proyecciones y las fotografías son un efectivo instrumento para plasmar la reflexión que el artista hace sobre el temor.
⎯ El miedo es un sentimiento ciertamente inquietante: no sabemos muy bien cómo se produce y en ocasiones nos resulta incluso extraño justificar por qué se produce. Preguntarnos sobre por qué tenemos miedo puede o no ayudarnos a entenderlo. Lo único que podemos afirmar con rotundidad es que todos hemos tenido miedo: ya fuera desde un ámbito más sentimental (a la soledad, a la pérdida...) o desde uno más físico (a las alturas, a la muerte...), aunque esta distinción es más bien nominal, ya que en ambos casos los miedos se relacionan: el temor a la muerte va intrínsecamente unido a la pérdida.
⎯ Los personajes retratados en “La agonía del destierro” sienten una especie de claustrofobia, encerrados en un pequeño habitáculo que no nos permite situar un espacio con claridad; los protagonistas intentan moverse,
⎯ “La agonía del destierro” es una interesante muestra visual de aquellos sentimientos privados de miedo que todos sufrimos en algún momento; las dos proyecciones y las fotografías son un efectivo instrumento para plasmar la reflexión que el artista hace sobre el temor.
⎯ El miedo es un sentimiento ciertamente inquietante: no sabemos muy bien cómo se produce y en ocasiones nos resulta incluso extraño justificar por qué se produce. Preguntarnos sobre por qué tenemos miedo puede o no ayudarnos a entenderlo. Lo único que podemos afirmar con rotundidad es que todos hemos tenido miedo: ya fuera desde un ámbito más sentimental (a la soledad, a la pérdida...) o desde uno más físico (a las alturas, a la muerte...), aunque esta distinción es más bien nominal, ya que en ambos casos los miedos se relacionan: el temor a la muerte va intrínsecamente unido a la pérdida.
⎯ Los personajes retratados en “La agonía del destierro” sienten una especie de claustrofobia, encerrados en un pequeño habitáculo que no nos permite situar un espacio con claridad; los protagonistas intentan moverse,
encontrar un resquicio de oxígeno al parecer sin conseguirlo.
⎯ No he podido dejar de pensar en Freud al ver estas piezas: esa idea de lo siniestro, lo que nos perturba y no se ubica lejos de nuestra intimidad, muy al contrario, está profundamente ligado a esta; en su artículo “Lo siniestro”, de 1919, el psicoanalista decía que en aquellos lugares más familiares de nuestra privacidad era donde aguardaba el verdadero peligro y el temor real. Ciertamente Robert Wiene tomaría esto como referencia en “El Gabinete del Doctor Caligari” cuando Cesare secuestra a la muchacha de su lecho. Hay, pues, cierto paralelismo con las fotografías de Marcos Arroyo: ¿dónde están atrapados los retratados? Lo más probable es que lo estén en un lugar conocido y de confianza, quizá en su propio subconsciente, territorio desconocido que alberga aquellas pulsiones cuasi peligrosas para el consciente común, y que paradójicamente forma parte de nosotros y de nuestra identidad.
⎯ Pareciera que nos descubrimos a nosotros mismos en esas fotografías, identificándonos con los personajes: tan humano es el miedo que todos nos sentimos unidos por él.
⎯ No he podido dejar de pensar en Freud al ver estas piezas: esa idea de lo siniestro, lo que nos perturba y no se ubica lejos de nuestra intimidad, muy al contrario, está profundamente ligado a esta; en su artículo “Lo siniestro”, de 1919, el psicoanalista decía que en aquellos lugares más familiares de nuestra privacidad era donde aguardaba el verdadero peligro y el temor real. Ciertamente Robert Wiene tomaría esto como referencia en “El Gabinete del Doctor Caligari” cuando Cesare secuestra a la muchacha de su lecho. Hay, pues, cierto paralelismo con las fotografías de Marcos Arroyo: ¿dónde están atrapados los retratados? Lo más probable es que lo estén en un lugar conocido y de confianza, quizá en su propio subconsciente, territorio desconocido que alberga aquellas pulsiones cuasi peligrosas para el consciente común, y que paradójicamente forma parte de nosotros y de nuestra identidad.
⎯ Pareciera que nos descubrimos a nosotros mismos en esas fotografías, identificándonos con los personajes: tan humano es el miedo que todos nos sentimos unidos por él.
⎯ Es quizá un resquicio romántico lo que se muestra en esta exposición: vivir atrapados para poder liberarnos ante la evidencia del hecho. El título nos da pistas sobre esto: “La agonía del destierro”, el temor de aquel que debe exiliarse para encontrarse a sí mismo.
⎯ Es esta una exposición cargada de sensaciones, capaz de hacernos llegar un poco de lo que sienten los retratados a través de grandes fotografías recubiertas de cinta de embalar, insistiendo en la idea de captura; es una muestra que pone de manifiesto una reflexión en torno al miedo, el temor y el subconsciente.
Semíramis González
Crítica de arte
⎯ Es esta una exposición cargada de sensaciones, capaz de hacernos llegar un poco de lo que sienten los retratados a través de grandes fotografías recubiertas de cinta de embalar, insistiendo en la idea de captura; es una muestra que pone de manifiesto una reflexión en torno al miedo, el temor y el subconsciente.
Semíramis González
Crítica de arte
⎯ "La agonía del destierro" fue expuesta también en "Chispas, tu primera colección" en El Hervidero (galería Espacio Líquido) en 2011, a modo de objetos lúdicos para trueque.
⎯ La agonía del destierro
⎯ “La agonía del destierro” explora a través de la fotografía y el video las nociones freudianas sobre el subconsciente.
De las fotografías que podemos ver surgen personajes que parecen atrapados en un espacio claustrofóbico, minúsculo, pero al mismo tiempo ausente: no somos capaces de saber dónde se encuentran.
A modo de catarsis los espectadores se sumergen en su propio “Yo”, en un subconsciente privado y encuentran en cada escena una parte íntima de su vida, un espacio personal donde todos vivimos atrapados por algo.
“La agonía del destierro” es una exposición sobre el temor interno y privado de cada uno; una reflexión sobre el miedo en la sociedad actual: ¿a qué tenemos miedo? ¿nos sentimos atrapados? ¿de qué nos escondemos?.
De las fotografías que podemos ver surgen personajes que parecen atrapados en un espacio claustrofóbico, minúsculo, pero al mismo tiempo ausente: no somos capaces de saber dónde se encuentran.
A modo de catarsis los espectadores se sumergen en su propio “Yo”, en un subconsciente privado y encuentran en cada escena una parte íntima de su vida, un espacio personal donde todos vivimos atrapados por algo.
“La agonía del destierro” es una exposición sobre el temor interno y privado de cada uno; una reflexión sobre el miedo en la sociedad actual: ¿a qué tenemos miedo? ¿nos sentimos atrapados? ¿de qué nos escondemos?.